Dame de tu droga
del gusto agrio de tu tierno sexo
Permíteme adentrarme
tras el nimio límite de tu elástico rosa.
del gusto agrio de tu tierno sexo
Permíteme adentrarme
tras el nimio límite de tu elástico rosa.
Provéeme de huesos y cartílagos
del arco corpóreo de tu dúctil clavícula
Déjame acercarme
y jadear al ritmo de tu palpitante vientre.
del arco corpóreo de tu dúctil clavícula
Déjame acercarme
y jadear al ritmo de tu palpitante vientre.
Oh, dulce niña
concédele a este espíritu errante,
alma de acero y polvo,
el aliento y el vigor
de tu carne blanda
y tu piel morena
ahora
y por los siglos de los siglos
Amén.
concédele a este espíritu errante,
alma de acero y polvo,
el aliento y el vigor
de tu carne blanda
y tu piel morena
ahora
y por los siglos de los siglos
Amén.
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