martes, 23 de abril de 2013

Para mis amigos los vagos

Los estudiantes vagos no tenemos vergüenza ni para con nosotros mismos. Somos capaces de llevarnos al limite de nuestras capacidades físicas con tal de no fallarle al profesor. Eso si, procuramos buenos resultados sin la necesidad de hacer muchos sacrificios. Unas cuantas horas de sueño perdidas no hacen daño, pero jamas dejamos de beber con nuestros compinches. Ea, aveces estamos tan dormidos que los textos que escribimos ni coherencia tienen (exactamente como este texto que escribo casi sonámbulo).

No importa, continuo...

Los vagos no tenemos sentido del tiempo ni de la recompensa.  Disfrutamos de los premios antes de haberlos ganado y administramos el tiempo según nos convenga. No nos esforzamos a menos que sea extremadamente necesario.

Dejamos todo para ultima hora, nos quemamos cuando nos toca, pero salimos (casi) siempre victoriosos. Realmente no entiendo como no nos va tan mal. Quizás es solo un poco de suerte. Si no estoy mal, algunos son genios que no usan todo su potencial y otros somos tan solo una partida de mediocres procastinadores. Pero, sin importar la condición, todos obtenemos resultados no tan malos... y no nos ponemos bravos.

Y lo peor es que me siento orgulloso de ser un vago. Si, llevo una plaquita en la frente que dice ORGULLOSAMENTE VAGO. Es mas, me siento tan feliz de ser vago que muy pronto y con un poquito de esfuerzo, les estaré regalando una técnica muy útil para desperdiciar mas tiempo y gastar menos tiempo haciendo trabajos tediosos.

Próximamente esperen, una obra de vagos para vagos:

LA GUÍA PRACTICA Y FÁCIL PARA LEER Y RESEÑAR (O RESUMIR) TEXTOS ACADÉMICOS.